Definición de e-Commerce
El e-commerce es un término anglosajón que se refiere al comercio realizado electrónicamente, el comúnmente llamado comercio online. Aunque existen conceptos similares, como el e-business, debemos tener claro que el e-commerce o comercio electrónico se refiere a la propia transacción comercial como tal, esto es, al cambio de un bien, producto o servicio por dinero u otro bien similar.
Las modalidades del comercio online son las mismas que las del comercio tradicional; podemos hablar de trueques, compra-venta, alquiler, servicios… sin embargo la característica primordial del e-commerce es que, al contrario que el comercio tradicional, donde el comprador y el vendedor establecían un contacto personal, aqui la transaccion se lleva a cabo integramente por medios electrónicos, sin necesitar un contacto físico. Entre los medios electrónicos de pago más comunes tenemos transferencias electrónicas, tarjetas de crédito…
Las ventajas para el vendedor son evidentes; este no tiene que desplazarse hasta el lugar del comprador para vender su mercancía, ni mostrar los productos, ni abrir tiendas en cada ciudad. Simplemente lo oferta en la red, en donde el potencial comprador puede adquirirlo. Y no sólo eso, sino que esos compradores potenciales se multiplican exponencialmente, al ser internet una red global. Con un coste único se puede llegar a casi 2000 millones de personas, un nicho de mercado realmente tremendo, y en aumento. Es lógico que ante estas ventajas, actualmente el 99% de las empresas estén presentes en la red, donde es tan importante la calidad del producto como el marketing directo o indirecto de este. Cabe señalar, sin embargo, que aunque el e-commerce pueda parecer un concepto ligado a la llegada de Internet, el comercio electrónico se desarrolló a raíz de la invención de las tarjetas de crédito, y es posible realizar transacciones electrónicas fuera de Internet. De todos modos su auge ha venido ligado al desarrollo de la red de redes, y es por eso que en la actualidad ambos conceptos han quedado unidos para la gente.
Para el comprador, las ventajas son también enormes; basicamente puedes acceder a una selección enorme de productos sin desplazarte, desde la tranquilidad de tu casa, comparar un producto con otros similares, ver las opiniones de otros compradores anteriores, sus características… y todo ello sin la presión de un vendedor, ni colas, ni desplazamientos.
Naturalmente, también tiene sus desventajas. No es oro todo lo que reluce, y menos si ni siquiera puedes tocarlo, dicen los viejos dichos. Como en todos sitios, existen empresas fraudulentas contra las que los gobiernos intentan luchar con energía, que venden productos defectuosos o inexistentes. Además, la calidad o características de los productos pueden parecer distintas en la web que en mano, y tampoco se tiene el consejo personal de un vendedor especializado. Muchos achacan al comercio electrónico que sea frío, impersonal, que además acaba con los comercios tradicionales, siendo una causa de destrucción de empleo y deslocalización económica.
Con todo esto, parece que las ventajas sobrepasan con mucho a los pequeños inconvenientes que a buen seguro se acabarán subsanando con el tiempo. Y es que el e-commerce ya está implantado en los paises desarrollados, y se prevé que continue creciendo hasta llegar a substituir al comercio tradicional en pocos años, dejando a este como un mercado residual, y no solo en productos duraderos, sino incluso en bienes perecederos o de consumo que hasta ahora tipicamente se adquirían en lugares físicos (como alimentos, por ejemplo).
Por Sistemas, el 11/02/2005.