Sistemas

Microsoft podría apostar por el formato "Galaxy Note" para Windows Phone 8


Estos últimos días se han dejado escuchar una serie de rumores sobre lo que Microsoft llama el formato "Slate" (nada que ver con aquel primer tablet ligero de HP) y el protagonismo que este podría tener en la próxima generación de dispositivos que monten Windows Phone 8.

Según estos rumores, Microsoft considera como formato Slate los terminales con una gran pantalla, de unas cinco pulgadas y, por lo tanto, similares al Samsung Galaxy Note, un híbrido a medio camino entre un smartphone y un tablet, equipado con Android, y que le ha proporcionado un gran éxito al fabricante surcoreano.

De ser ciertos los rumores, esta situación puede desembocar, por lo menos, en un problema semántico: en la actual terminología móvil, el vocablo Slate designa los terminales con un diseño frontal minimalista, con pocos botones físicos. El iPhone sería el ejemplo paradigmático del formato Slate, siendo casualmente también el primer smartphone moderno y el primero con una pantalla e interfaz gráfica multitáctil.

¿Y quien fabricará estos dispositivos? Esta es una información que no ha trascendido, pero parece que Microsoft no hará la misma jugada que con su tableta Surface -por lo menos de momento-, y dejará que se encarguen de ello los fabricantes con los que ahora mantiene acuerdos, como Samsung, HTC o, especialmente, Nokia.

Con este movimiento, la multinacional norteamericana esperaría potenciar un segmento de mercado al que cada vez tienden más modelos de smartphones (podéis fijaros que las pantallas son cada vez más grandes) pero que ahora mismo solamente se encuentra ocupado por dos o tres modelos, el principal de los cuales es el Galaxy Note de Samsung.

El gran éxito de este dispositivo podría haber hecho pensar en los cuarteles generales de Microsoft que pueden hacer un hueco importante en un mercado que justo empieza a despuntar -y, por lo tanto, al que le queda mucho por recorrer- consiguiendo con ello una posición ventajosa y aumentando su cuota de mercado global.



Por Guillem Alsina, el 21/06/2012.

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