¿Qué es la Arduino?
Las llamadas “placas de desarrollador”, como la Raspberry Pi, y todos sus productos derivados, están ganando mucha atención en el mercado tecnológico, tanto para desarrolladores hobbistas como para profesionales.
Otra iniciativa en este campo es Arduino, una plataforma hardware y software que cuenta con una potente comunidad de desarrolladores, y también con el empuje de una empresa tras de sí.
Arduino nació en 2005 en un instituto italiano como forma de abaratar los costes de los microcontroladores empleados en la clase de tecnología.
Porque, al fin y al cabo, la misión de Arduino es esta, la realización de tareas de microcontrolador.
Un microcontrolador es un pequeño circuito integrado programable y capaz de ejecutar una serie de instrucciones, habitualmente conectado a un aparato al cual controla, y que es capaz de llevar a cabo una serie delimitada de acciones, dependiendo o no de factores externos.
Por ejemplo, cada máquina distinta en una fábrica acostumbra a estar controlada por un microcontrolador, que es la pieza que le dice lo que debe hacer, o bien qué hacer o como avisar en caso que la operativa se salga de los parámetros habituales, así como la forma de recuperarse de errores, incluso los imprevistos.
Al haber nacido en un entorno estudiantil, las premisas de Arduino son la facilidad de uso, un precio económico, y el poder llegar a todo el mundo.
El lenguaje de programación empleado es universal, de fácil aprendizaje, y el IDE (entorno integrado de desarrollo, por sus siglas en inglés) se encuentra disponible para Windows, macOS, y GNU/Linux para plataformas x86 de 32 y 64 bits, y Linux sobre ARM.
Arduino puede utilizar varios lenguajes de programación, siendo Java el elegido en el entorno IDE oficial. Además, algunos fabricantes han lanzado sus propias soluciones de desarrollo para esta plataforma.
A lo largo de este tiempo, el proyecto Arduino ha lanzado al mercado diversos modelos de placa.
Es el caso de la Arduino Galileo, de la Uno, de la Due, o la Micro entre otras. Estas placas se venden por un precio módico que parte de alrededor de los 20 euros hasta llegar a unos 60, según los casos, teniendo en cuenta la potencia del hardware y las opciones que incorpora y permite.
Lo que permiten hacer estas placas puede ampliarse mediante placas de expansión, que también se venden para dotar de determinadas funcionalidades al hardware básico.
Dichas placas de expansión dotan a las placas base Arduino de diferentes tipos de conectividad (como Wi-Fi, Bluetooth, LoRa), antenas, radios definidas por software, sensores, controladores, etc. Su denominación es shields (escudos en inglés).
De esta forma, es posible ampliar el rango de desarrollo de Arduino, a la par que se posibilita su uso en aplicaciones del mundo real, donde puede cumplir una función no solo de prototipado, sino de desarrollo funcional.
La posibilidad de dotar a las placas Arduino, mediante expansiones, de puertos de comunicaciones legacy, también facilita el control de antiguos dispositivos y máquinas. En este sentido, podemos citar por ejemplo las placas de expansión con puertos RS232.
En cuanto al desarrollo de software, si bien el entorno oficial trabaja con el lenguaje de programación Java, también podemos utilizar otros lenguajes, como C++.
Entre estos se cuentan C#, el lenguaje del sistema Matlab, PHP, Python, Ruby, VBScript, o Visual Basic .NET.
La versatilidad de Arduino es tal que incluso se ha llegado a construir un teléfono móvil (el ArduinoPhone), del cual se han hecho públicas las instrucciones. Obviamente, su manejabilidad deja mucho a desear en comparación con un smartphone comercial, pero su funcionalidad es total.
Por Guillem Alsina, el 12/05/2018.