¡Pero sonate esa nariz electrónica!
No se lo dijo la madre de Mick Jagger a su hijo ‘rolinga’ alguna vez; no, no. Tampoco es un delirio (¿ o sí?): la nariz electrónica está entre nosotros y ya posee hasta moco propio… de un desempeño realmente notable.
Concretamente, se cubrió un equipamiento olfativo con una mezcla de polímeros que imitan la acción de la mucosidad de una nariz como la que tenemos todos, con lo cual esta ‘maravilla’ de la tecnología puede ampliar el rango de localización de aromas, ¿no es fantástico?
El ‘moco artificial’ fue desarrollado por expertos de las universidades inglesas de Warwick y Leicester, y no es nada fácil imitar nuestros sentidos: tu nariz posee 100 millones de receptores que operan en colaboración de un modo complejo para saber distinguir las moléculas con las cuales se topan.
El aparato es muy barato, dado que cuesta sólo 10 dólares. ‘Nuestro moco artificial no solamente entrega una mejor discriminación de los olores en la nariz electrónica, sino que también posibilita reducir los tiempos de análisis en relación con otras técnicas tradicionales’, dijo Julian Gardner, uno entre los encargados de crear el dispositivo.
Si vamos a la nariz electrónica, en lugar de 100 millones de estos receptores, encontraremos 50 mil, es decir, 2000 veces menos, por lo que su capacidad es considerablemente menos eficaz, pero con el nuevo moco artificial la cosa mejoró.
La función del moco en nuestra nariz tiene que ver con poder disolver las esencias, separar las diferentes moléculas que contienen aromas, llegando a los receptores en determinado tiempo según sea una molécula de una forma o de otra, con lo cual esas diferencias de tiempo son aprovechadas para enviar las moléculas hacia tal o cual receptor para tener precisión a la hora de determinar el aroma.
Más información:
http://estadis.eluniversal.com.mx/articulos/39971.html
Por Marcos Guglielmetti, el 14/05/2007.
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