Guía sobre el uso de tecnologías RFID
Guía sobre el uso de tecnologías RFID
A medida que se intensifica el interés por la identificación por radiofrecuencia (RFID), muchas empresas del sector de la distribución y proveedores se sienten abrumados por los términos extraños y las rápidas actualizaciones de los estándares o los últimos requisitos de cumplimiento. Esta guía está diseñada para permitirle adentrarse en la marea de información y entender cómo se aplica esta tecnología a su negocio.
Para determinar si la RFID es adecuada para un negocio, es conveniente contestar a las cinco preguntas de este cuestionario de autoevaluación sobre RFID:
1. ¿Se beneficiaría su negocio de una mejor gestión de los inventarios?
2. ¿Necesita saber más sobre los contenidos de sus estanterías o su almacén?
3. ¿Necesita tener un mayor control sobre los productos a lo largo de la cadena de suministro?
4. ¿Tiene proveedores distintos o remotos que tienen dificultades para acceder a bases de datos centrales?
5. ¿Su organización forma parte de una cadena de suministro más amplia en la que puede convertirse en obligatorio el uso de RFID?
Las diez grandes verdades sobre la RFID
1. La RFID no es flor de un día
Contrariamente a lo que se piensa, la RFID está entre nosotros y es usada por las empresas desde hace muchos años. Una de las razones por las que esta tecnología está recibiendo tanta atención ahora es porque Wal-Mart la impuso a sus proveedores a comienzos de 2005. Esta orden a los 100 proveedores más importantes de la empresa establecía la necesidad de contar con etiquetado en los pallets y las cajas a comienzos de año, mientras que para el resto de proveedores, la obligación comenzaba en 2006.
2. La RFID se está desarrollando ahora
Es probable que la RFID alcance tasas de adopción más altas que otras tecnologías de identificación automática, ya que esta solución es capaz de aprovechar los sistemas de código de barras actuales, que han allanado indudablemente el camino a la tecnología RFID.
3. Implantada correctamente, la RFID rentabiliza la inversión de forma cuantificable
Muchas empresas de distribución y proveedores siguen considerando erróneamente que la RFID es cara, pero la realidad es que se puede rentabilizar la inversión rápidamente con la planificación adecuada, lo que beneficia tanto a unas como a otros. La capacidad de generar informes automáticamente en tiempo real y con datos precisos puede brindar una importante ventaja a todas las empresas de distribución.
4. RFID puede mejorar la gestión del inventario, el servicio al cliente y el proceso de suministro
– Gestión de inventario
El control del inventario es un proceso que a menudo resulta costoso y largo. La RFID puede automatizar la gestión del inventario, ayudándole así a optimizar las existencias.
– Servicio al cliente
Los artículos con etiquetas RFID pueden visualizarse de un establecimiento a otro, de forma que las peticiones de los clientes pueden tramitarse rápida y fácilmente desde una base de datos centralizada.
– Consolidación de pedidos más rápida
La eficacia que se consigue con la generación de notas de envío por adelantado (ASN) mediante etiquetas inteligentes RFID pasivas ha permitido a los proveedores mejorar los plazos de entrega, lo que a su vez ha reducido los errores en la cadena de suministro.
5. La RFID se está abaratando
Los costes asociados a la RFID están disminuyendo rápidamente, como se puede apreciar en los anuncios recientes sobre los costes de esta solución, y seguirán bajando rápidamente a medida que las empresas adopten esta tecnología. Además, la estandarización está reduciendo drásticamente los costes asociados a esta tecnología. A pesar del relativamente elevado coste actual, las empresas de distribución deberían empezar a estudiar y probar soluciones RFID tan pronto como puedan para aprovecharlas al máximo.
6. La RFID y los códigos de barras tienen su sitio en el mercado
La RFID y los códigos de barras tienen sus propios usos y es probable que sigan coexistiendo. Sin embargo, los códigos de barras tienen unas limitaciones que la RFID sí suple:
– Línea de visibilidad
Los lectores de códigos de barras sólo pueden leer las etiquetas cuanto están en su línea de visibilidad, a diferencia de los lectores RFID. Las etiquetas RFID pueden leerse dentro de pallets o a través de otros productos, lo que permite determinar con exactitud su contenido.
– Sólo datos de producto
Los códigos de barras sólo identifican el código UPC. Las etiquetas RFID asignan un número distintivo a cada artículo. Además, los dispositivos RFID de lectura-escritura permiten actualizar la información sobre el artículo si es necesario. Esta función podría ser beneficiosa para hacer seguimientos de las reparaciones de una pieza, para identificar artículos concretos que se han de retirar o para gestionar productos con un vida corta en los estantes.
– Mayor velocidad
Gracias a su capacidad real de lectura automática sin intervención humana, surge la oportunidad de aumentar la velocidad de embalaje en pallets y cajas. De esta forma, se puede mejorar la eficiencia de la cadena de suministro.
7. No se trata de sentarse a esperar
Posponer la implantación de la tecnología RFID para ver qué ocurre en el mercado, puede afectar la innovación en una compañía y perder ventajas empresariales frente a sus competidores que seguramente sí están probando la tecnología RFID.
8. No todas las etiquetas RFID son iguales
No todas las etiquetas RFID valen para todo. Existen diferentes tipos de etiquetas y cada uno posee unas características que le hacen útil dependiendo de la aplicación:
– Etiquetas activas
Las etiquetas activas cuentan con una batería que amplía el radio de lectura. La batería aumenta el coste unitario básico.
– Etiquetas pasivas
Estas etiquetas utilizan el campo magnético generado por el lector RFID para activarse. Si bien el radio de lectura es menor, el coste unitario también es más bajo que el de las etiquetas activas.
– Etiquetas de sólo lectura/un solo uso
Una vez codificada la información en la etiqueta, ésta no se puede modificar. Para sacar el máximo partido a estas etiquetas, tienen que estar conectadas a una base de datos con información detallada sobre el artículo. Estas etiquetas son las más baratas, lo que las convierte en las más idóneas para artículos de bajo precio.
– Etiquetas RFID de lectura/escritura
La flexibilidad de las etiquetas de lectura/escritura es de gran ayuda en el caso de almacenes remotos desde los que no es posible conectar con la base de datos.
9. La RFID se puede integrar gradualmente en el negocio
No se trata de adoptar una postura de «todo o nada». Puede controlar cuidadosamente el impacto y medir los beneficios del despliegue de la tecnología RFID incorporándola progresivamente al negocio. Generalmente, las empresas de distribución optan por empezar con las líneas de productos de más valor, como equipos eléctricos, antes de extenderla a otras áreas del negocio. De igual forma, usted no necesita una implantación total de tecnología RFID para empezar a disfrutar de las ventajas. Generalmente, la cadena de suministro combinará RFID, etiquetas inteligentes y códigos de barras tradicionales.
10. No hay barreras importantes que no se puedan superar a la hora de la implantación
Para conseguir un rendimiento óptimo de un sistema RFID, puede ser necesario empaquetar los productos de otra forma o en embalajes especiales, o cambiar los procesos de negocio para eliminar obstáculos que impidan utilizar la RFID. Sin embargo, el pensamiento creativo puede ayudarle a ser partícipe de las ventajas de esta tecnología.
Por Sistemas, el 11/02/2006.