Cómo instalar un antivirus
Los antivirus son programas que sirven para detectar aquellas amenazas que puedan dañar tu ordenador. Estas amenazas atacan al sistema operativo de tu PC y muchas veces puede llegar a estropearse del todo. Con la aparición de Internet, los virus se difundieron por doquier y, por eso, actualmente los antivirus son muy importantes para proteger el sistema.
Muchos antivirus actuales son capaces de reconocer malwares; desinfectarlos y bloquearlos. Sin embargo podemos encontrarlos de varios tipos: preventores (previene la infección), identificadores (identifica los programas infecciosos que afectan al sistema), descontaminadores (descontamina el sistema que fue infectado), cortafuegos (bloquea el acceso a webs actuando como muro de protección), antispam (detecta mensajes no deseados que son enviados por personas desconocidas), antitops-ups (evita que aparezcan ventanas emergentes mientras se navega por Internet).
Los antivirus se pueden comprar en tiendas especializadas de informática, o también descargar por Internet de forma igualmente segura. Debido al alto precio de algunos, lo mejor es probar uno de los gratuitos que puedes comprar por Internet, si es que no quieres ser un pirata… En cualquier caso, incluso los más famosos, como Avast, Norton, Avira o AVG, tienen versión gratuita.
En la página de Softonic que te mostramos es donde puedes iniciar la descarga de forma gratuita:
http://www.softonic.com/s/antivirus. Pero, si tienes claro el anti-virus que quieres, puedes descargarlo mejor en la página del fabricante, puesto que te ahorrarás tiempo e instalaciones innecesarias de tonterías.
Una vez que lo hayas descargado debes abrirlo y observar que te ponga “seguro”. Si no aparece esta palabra, necesitas activar tu antivirus.
Deberás analizar el equipo una vez al mes a aproximadamente, para que elimine todos los virus del sistema y para ello solo tendrás que pinchar en un botón que, dependiendo del programa, se puede llamar de una forma u otra, pero que se parecerá a “analizar el equipo”. Una vez hecho esto, tienes que dejar que el antivirus trabaje durante un buen rato.
Después podrás seleccionar el tipo de análisis que deseas hacer: rápido o completo del sistema siendo este último el más conveniente, ya que, te analizará todos los programas, archivos etc… evitando que pueda saltarse alguna amenaza.
Los antivirus tienen fecha de caducidad lo que obliga a descargarse o comprarse uno nuevo cada cierto tiempo. Normalmente duran un año y te suele mandar avisos con antelación para que no te pille desprevenido.
Por supuesto, el tener antivirus no evita que se te pueda colar algún malware a tu ordenador por lo que debes tener cuidado que páginas visitas, no abrir correos de extraños o no deseados, y actuar en el momento de observar virus en tu ordenador. Desde luego, actualiza tu anti-virus cada vez que sea posible, para que su base de datos de virus se ponga al día.
Por tobas, el 24/01/2014.
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