¿Qué es la Nomofobia? ¿Por qué importa?
Si te preguntara a ti, amigo lector, qué invento moderno ha calado más hondo en tu vida, probablemente me responderías que el teléfono móvil, ya que nunca o casi nunca sales de casa sin él. Y no es extraño, mucha gente firmaría la misma respuesta sin dudarlo.
Hasta tal punto ha provocado impacto que, efectivamente, mucha gente no saldría nunca de casa sin él, literalmente, hasta el punto de tener miedo a tener que estar sin su smartphone.
La nomofobia es el transtorno de la salud emocional consistente en el miedo a no poder disponer a libre voluntad del smartphone.
Dicho trastorno se manifiesta en forma de ansiedad y estrés, y viene provocado tanto por el hecho de no disponer físicamente del móvil, ya sea porque la persona se lo haya dejado en alguna parte, ya sea porque le ha sido sustraído, como de no tener cobertura de voz y/o datos, o de haber agotado el saldo de su cuenta y, por lo tanto, no poder trabajar con el celular de la forma habitual.
Por descontado, también se produce cuando el terminal se estropea y queda inutilizado.
Otros síntomas que puede presentar, tanto físicos como emocionales, son las palpitaciones, alteraciones respiratorias, depresión, y ataques de pánico.
La desorientación, propia de aquellas personas a las que les ha sido sustraído algo que necesitaban para mantenerse orientadas, es también otro síntoma; la persona no sabe lo que tiene que hacer porque dependía, en gran medida, del dispositivo móvil: sus citas en la agenda, sus fotografías almacenadas en la memoria…
Muchas veces, el problema en este último aspecto es que no tiene copias de seguridad, o no sabe que las tiene (caso de los uploads automáticos desde el iPhone a iCloud, o en los terminales Android a Google Photos.
Al ser una dolencia moderna, su diagnóstico no ha sido “estandarizado”, y su reconocimiento es complicado. De igual forma, su tratamiento tampoco es uniforme ni estandarizado.
Probablemente queda mucho por descubrir de la nomofobia, una dolencia que entra en la categoría de las adicciones (en este caso, al celular), como la adicción al juego o al sexo.
La novedad de esta patología lleva a que no todos los médicos estén bien informados sobre su sintomatología, y que haya diversas líneas de tratamiento. Probablemente, a lo largo de los próximos años, se irán acotando los síntomas y perfeccionando el diagnóstico de esta enfermedad, así como mejorando los tratamientos.
La nomofobia también afecta a las relaciones entre las personas, ya que en primer lugar, las reduce (quienes la padecen, se encierran en el mundo que crean con su celular), y en segundo lugar, cuando no tienen disponibilidad de su celular, solamente tienen la atención centrada en conseguirlo.
Incluso en momentos en los que pueden “desconectar” como, por ejemplo, un domingo por la mañana o por la tarde, estas personas viven “enganchadas” a su móvil, por lo que su vida social se va resintiendo cada vez más.
Es difícil definir como combatir la nomofobia, pero el primer consejo no puede ser otro que ponerse en manos de un profesional, un psicólogo.
Nadie mejor que un profesional de la psicología para dirigirnos en este viaje. Si lo que vemos es un riesgo de caer en ella, ¿por qué no tomar medidas para evitarlo?
En primer lugar, debemos ser conscientes de que, si necesitamos estar comunicados por trabajo, en caso de pérdida o sustracción del móvil, nuestra compañía nos podrá hacer un duplicado de la tarjeta SIM para que podamos continuar comunicándonos y recibiendo las críticas llamadas de nuestros clientes y proveedores.
Igualmente, podremos salir del paso con un terminal que nos presten, o bien adquirir uno temporal por un precio asequible.
Si de lo que hablamos es de los contenidos del móvil, aquí hay una solución fácil: copias de seguridad. Es simple conectar el terminal a una computadora para descargar las fotografías que hayamos hecho con él, mientras que también hay herramientas para ello como el antes comentado Google Photos, los contactos de la misma Google, Apple, o las respectivas agendas, entre otros.
Estas herramientas permiten la consulta de nuestros datos desde una interfaz web a través de cualquier computadora.
Otra buena medida es distanciarse en momentos de ocio del móvil.
¿Seguro que lo necesitas para irte a la playa o la piscina? ¿o a la barbacoa de tu primo? ¿no será mejor aprovechar el tiempo hablando con quien tienes al lado, que mirando lo que hacen otros en las redes sociales?
Fotolia – sheva_ua
Por Guillem Alsina, el 08/02/2019.