Chrome de Google: el navegador que vino a molestar a todos
De vez en cuando no viene mal hacer un poco de historia. Veamos entonces la acogida que tuvo Chrome en la prensa, pero antes debo decir algo: hay veces en que una persona, una organización o un objeto molestan a todo el mundo. Es el caso del navegador Chrome de Google: molesta tanto a la empresa privativa Microsoft como a la comunidad del Software Libre. Se encuentra en el medio allí ‘haciendo quilombo’ para ‘bardear’ al resto e intentar que Google gane aún más dinero. Si no sos argentin@ es probable que no entiendas la palabra bardear y quilombo… digamos que derivan del lunfardo porteño y significan: problemas, lios.
Según varios periodistas especializados que han puesto el ojo en Chrome no bien salió a la cancha, podría no estar listo para rivalizar con Internet Explorer, si bien es rápido, atractivo y posee características importantes, tales como la separación de procesos por pestañas, impidiendo que un cuelgue en una pestaña damnifique a las otras, congelando todo el navegador. Matthew Moore de Daily Telegraph ha opinado en este sentido, omitiendo que Chrome compite en verdad con Firefox, el navegador que se encuentra destronando de a poco y por primera vez a Internet Explorer del mercado.
Y digo que Chrome nació para competir con Firefox más que con Internet Explorer porque este último tiene todas las de perder, mientras que Firefox tiene todas las de ganar porque ya se ha instalado en el usuario técnico tanto de Windows, Mac o GNU/Linux como el mejor navegador, siendo a la vez similar a IE en su interface, por lo cual el cambio no es complicado. Al contrario, Chrome exige que el usuario se adapte a una nuava interface, una forma de ver las cosas a la cual no está acostumbrado, la persona se siente extraña, como si no estuviera viendo Internet, sino otra cosa.
Sin embargo la dueña de Firefox, la Fundación Mozilla, comunicó que Chrome no fue una sorpresa y que su objetivo no es competir con Firefox… quizá las declaracione se deban a que Google financia Firefox. En verdad esto se podría ver del siguiente modo: a Google le va muy bien destronando a Internet Explorer y Microsoft con Firefox, por eso le brinda apoyo pero a la vez no puede controlarlo porque Firefox es manejado por una comunidad de software libre, en cambio puede probar, jugarse a que tendrá más suerte si ataca por varios lados a sus competidores, creando algo que, ellos piensan, será mejor.
Ya vimos en el pasado que Google se puede equivocar con sus desarrollos de software, si no me creen, piensen que debió comprar YouTube porque no pudo competir con Google Video. Algo similar pienso que ocurre en este caso: Google Chrome no podrá competir a un nivel aceptable con Internet Explorer y Firefox, quizá logre una cuota de mercado importante en el futuro, pero esto sólo se debería a cambios trascendentales en la interface de usuario, que lo hagan ver similar a Firefox, y/o a la incorporación masiva en netbooks y otra clase de dispositivos portátiles.
Más que preguntarse si Chrome es interesante o no, deberíamos preguntarnos por qué utilizar software privativo cuando existe software libre que lo reemplaza perfectamente. No importa incluso que Firefox sea mejor técnicamente por su enorme cantidad de extensiones, eso podría ser superado por Chrome algún día (si es que una comunidad lo ayuda), lo que importa es nuestra libertad, ¿o no?
Firefox mantiene y protege la libertad en la red.
Por Marcos Guglielmetti, el 28/05/2009.