Se estanca el crecimiento de GNU/Linux
Siguiendo las cifras publicadas estos últimos meses por Net Applications, puede verse claramente como la plataforma del pingüino no solamente ha dejado de crecer, sino que va de capa caída. GNU/Linux ha bajado de la barrera psicológica del 1% que había conseguido superar este pasado marzo.
El culpable, lejos de ser el Windows de Microsoft, parece más bien el Mac OS X de Apple, que sube espectacularmente (un punto porcentual en poco menos de un año) en detrimento del mismo Windows y de Linux.
La causa de esta subida del Mac OS X podría encontrarse en el eco mediático que están recibiendo en estos últimos años los productos de la factoría de Steve Jobs, y que han hecho del iPod o el iPhone auténticos “best-sellers” de masas. Ello ha conllevado que los usuarios finales se interesaran y acercaran a la plataforma de Cupertino, aumentando así las ventas y la penetración en el mercado de la compañía de la manzana mordida.
No obstante, Apple no es la única culpable del estancamiento del sistema del pingüino; el segmento de los netbooks ha significado una excelente oportunidad desperdiciada para obtener una ventaja competitiva sobre Windows.
Y es que al principio, Microsoft desdeñó a estas máquinas de bajas prestaciones y bajo coste, considerando que los usuarios preferirían computadoras más potentes y completamente equipadas. Sin embargo, se equivocaron: no pocos consumidores se han llevado a casa un netbook cómo máquina secundaria, incluso teniendo un portátil convencional, ya que el netbook lo utilizan al marcharse de viaje por el poco espacio que ocupa y su escaso peso.
Al ver el éxito de estas máquinas y que Linux podía acaparar el mercado, Microsoft se lanzó en pos de este. El éxito para la compañía de Redmond se ha visto asegurado por la facilidad con la que esta empresa consigue que los fabricantes utilicen su sistema operativo y aplicaciones en su máquina (y es que a los fabricantes e integradores les interesa y mucho), barriendo así a Linux de este campo y, con ello, quitándole la supremacía en un segmento de máquinas que habría podido proporcionar al pingüino un excelente punto de apoyo para “asaltar” las computadoras “tradicionales”.
No hay duda de que Linux lo va a tener complicado para volver a llegar al 1% del mercado, ya que si bien en el terreno de los servidores goza de buena salud, el principal mercado (y aquel en el que con ansia quiere expandirse) de los escritorios (desktop) va a ser más reacio a cambiar de Windows a él. Y Mac va a continuar subiendo.
La plataforma de Cupertino no va a parar su expansión. No ha llegado todavía al techo de su posible cuota de mercado en dispositivos móviles, lo que lleva aparejado que aún crecerán más (por poco que sea) sus ventas de computadoras para el usuario final.
Si a esto le añadimos el más que probable lanzamiento de un nuevo dispositivo tipo Tablet PC multimedia para el mercado final, y que podría ver la luz en algún momento de 2010, es seguro que sus ventas van a ir mejorando aún más. La crisis, pues, deja de lado a Cupertino.
¿Y Windows? puede bajar algo más, pero a buen seguro que recuperará algunas centésimas cuando salga al mercado su esperado y deseado Windows 7. Nunca antes un sistema operativo de Microsoft había generado tanta expectación justo antes de su lanzamiento.
Por Guillem Alsina, el 01/10/2009.