Sistemas

GNU/Linux Audio Conference en Berlín


Los músicos aparentemente están revolucionando la música electrónica con programas y con instrumentos realizados por ellos mismos.

La conferencia se realizó en la Universidad Técnica de Berlín y convocó a gente de todo el mundo vinculada con el Software Libre y la música… según quienes cuentan la historia, ‘muchachos de todas partes del mundo discutiendo horas frente a computadoras personales, con sus audífonos puestos, hablando en una jerga inextricable’… apuesto a que fue realmente así, basta con seguir las charlas en la lista de correo de linux-audio-user@music.columbia.edu para darse cuenta de que se trata de un grupo ciertamente muy ‘geek’ (fanático de la tecnología) y elitista, gente que quizá sepa mucho de programación y de música, pero a la que -en general- le cuesta llegar con palabras corrientes al resto de los usuarios de sistemas privativos, con el fin de que cambien al Software Libre.

Hablo con conocimiento de causa, dado que hace 2 años o más que estoy subscripto a la lista linux-audio-user@music.columbia.edu, en donde prácticamente todos los que estuvieron en LAC 2007 (Linux Audio Conference 2007) escriben a diario, discuten, se ayudan… el espíritu de la lista de correo es muy bueno y colaborativo, aunque realmente elitista.

Pero no sólo de software trata el evento: los geeks reunidos allí suelen fabricar sus propios elementos de hardware para controlar programas musicales, suelen utilizar complejos softwares como Puredata o Csound, los cuales espantarían a la mayoría de los músicos que recién se acercan a una computadora.

Miguel Álvarez Fernández, uno de los curadores de LAC 2007, explica por qué este ambiente es revolucionario: ‘Acá se están buscando novedades, podríamos decir revolucionarias, en el ámbito tecnológico. La plataforma Linux, y en general las plataformas llamadas de código abierto, permiten una nueva relación con la tecnología. Aquí todos colaboran con todos, es una comunidad. Vamos indagando posibilidades y redefiniendo el concepto de música’… aunque ¿no suena demasiado pretencioso redefinir el concepto de música?

La gente puede redefinir todos los conceptos que quiera, sinceramente, pero un problema al respecto será: ¿habrá oyentes para esa nueva música que tiene como base conceptos redefinidos de un modo radical? El tiempo lo dirá.

Para otros asistentes, el asunto no es tan innovador como lo pinta Miguel… Edgar Barroso piensa: ‘Sigue siendo lo mismo que la composición musical. Utilizo técnicas del barroco, de la música medieval; creo que sigue siendo lo mismo. Lo único que cambia son los medios’.

Por otro lado, definitivamente esta frase habla de un optimismo exagerado en cuanto a las esperanzas puestas en la tecnología:’La música del futuro, de melodías inexplicables, se genera con medios electrónicos.’ Eso último suena a lo que en la década de 1950 se promocionaba como las casas del futuro, con extraños aparatos que te untaban la manteca en la tostada mediante una mano robótica o cosas de similar nivel de disparate: al final seguimos untando la tostada con nuestras propias manos… porque es lo más lindo, lo más agradable, lo más bello.

Por el contrario, suena mucho más realista hablar de este tipo de cosas: ‘A un costado está otro mexicano, Sergio Luque. Acaba de estrenar su obra ‘De la Incertidumbre’ en la sala del Instituto Cervantes. Luque trabaja con un generador aleatorio de sonido, lo que le permite literalmente encontrar sonidos nunca antes escuchados por el oído humano.’ Programas como Alsa Modular Synth también permiten hacer este tipo de cosas.

La nota original (citada abajo), continúa y no tiene desperdicio, habla de que es imposible encontrar melodías en este nuevo mundo: ‘Es cierto, esta música está concentrada en timbres complejos, que para la mayoría de la gente sería ruido, pero que a mí me rompería el corazón si dijeran que es tal, aunque ya me lo han roto un par de veces; creo que es cuestión de acostumbrarse’.

Los dejo con los dos últimos párrafos y luego vuelvo:’Luego de un par de horas de concentración en esta música y luchando contra las costumbres tradicionales del oído propio, las emociones comienzan a surgir: es un mundo algo inhóspito, donde la guía de la melodía falta, pero donde comienzan a surgir emociones del todo comparables con la música tradicional.’

‘Lo que en un principio era puro desconcierto se va haciendo más cercano y ya se puede comenzar a creer que este extraño mundo musical se transforme alguna vez en la música usual que, quién sabe, quizá la próxima generación ya deposite, expectante y nerviosa, en su aparato de reproducción de CD’s.’

Nuevamente la -a mí parecer- exagerada esperanza en el ruido, el optimismo un tanto ridículo por la creatividad que tienen las máquinas, lo cual esconde, creo yo, una bancarrota estético-compositiva en ciertos grupos, en ciertas escuelas, en ciertas academias, en ciertas ideologías que pretenden que lo único importante en materia artística es innovar, cuando quizá lo verdaderamente importante sea 1º expresar lo que uno desea, 2º pasar un buen momento.

Nótese que el cronista habla de ‘es un mundo algo inhóspito’, sin melodías, ni más ni menos que el microcentro de Buenos Aires, por ejemplo. ¿Por qué duplicar ese ruido?

Personalmente pienso que la música llamada ‘contemporánea’, y en particular esa que se basa en llamar música al ruido, no hace más que trasladar el ruido de las ciudades (autos, motos, aviones, etc.) a los instrumentos y presentarlo si fuera música… sin ir más lejos, una caminata por el centro de mi ciudad sería un gran concierto para toda esta generación de músicos revolucionarios… y todo esto lo dice alguien que hace música con computadoras desde el año 1993, además del hecho de que desarrollo un sistema operativo para músicos y artistas en general llamado Musix GNU+Linux. En todo caso, queda abierta la polémica, yo no pretendo dar recetas, pero me encargué de comprar una guitarra acústica, una batería acústica, un bajo eléctrico, y si la computadora no enciende, puedo hacer música con estos instrumentos ‘contrarrevolucionarios’… es más, últimamente es normal que opte por apagar la computadora y escuchar en serenidad el sonido limpio de mi guitarra acústica… y como mucho, el cantar de algún ave en el patio…

En una sociedad industrializada en la que la creatividad fue pasando desde los hombres y mujeres hacia las máquinas, no está nada mal tener un control potencialmente total sobre las mismas utilizando Software Libre, pero de algún modo es un poco hacerle el juego al sistema de producción industrial alienante dejar en manos de las máquinas casi toda la creatividad artística.

Más información:

http://www.radional.gob.pa/portal/noticia.aspx?PaginaAnterior=Noticias.Aspx&NoticiaID=50615

Actualización: este artículo tuvo bastante éxito; me solicitaron traducirlo al inglés, pero como no disponía de tiempo suficiente, quedó en manos de la comunidad de usuarios y desarrolladores de Software Libre que lee y escribe en linux-audio-user: linux-audio-user—–lists.linuxaudio.org

Al final, el administrador de sistemas de CCRMA (Center for Computer Research in Music and Acoustics, Standford, EEUU), Fernando Lopez-Lezcano, realizó una linda traducción al inglés que disparó un largo debate sobre qué es música, qué es ruido, cómo asociamos lo que definimos como música según nuestra formación, según lo que llaman psicoacústica, etc.

Los invito a seguir estas repercusiones aquí:

www.musix.org.ar/wordpress/?p=93



Por Marcos Guglielmetti, el 28/03/2007.

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