Mapas de Apple: una historia incompleta
Así se ven algunas renderizaciones en Apple Maps
La compañía de Cupertino presentaba recientemente iOS 6, la nueva versión de su plataforma software para dispositivos móviles (iPhone, iPad, iPod Touch) que, como uno de sus principales cambios, incluye un nuevo servicio de mapas de la propia casa que substituye a Google Maps. Este último terminaba recientemente su contrato como sistema de cartografía y geolocalización por defecto para el sistema operativo de la manzana mordida.
Debido al estado de las relaciones entre Google y Apple, ni YouTube ni Google Maps han seguido como servicios incluidos por defecto en iOS ni como los recomendados por la compañía de Steve Jobs a sus seguidores, por lo que había que buscar alternativas. Si en el caso del vídeo, Apple ha optado por hacer desaparecer la app de YouTube, en los mapas se ha decantado por crear su propio servicio.
Este último, que ya está a disposición de los usuarios con la actualización a iOS 6 disponible desde hace unos días, incurre en graves errores como la localización de accidentes geográficos y ciudades muy lejos de su emplazamiento real. Así, por ejemplo, sitúa Berlín (la capital de Alemania) en la Antártida, o el río Ebro (España) en Brasil.
Las representaciones en 3D de los edificios y otras estructuras como grandes autopistas también presentan errores que se han convertido en objeto de burla en Internet. Podemos ver numerosas capturas de pantalla del cliente de Apple Maps mostrando edificios que parecen hechos de gelatina por las formas que adoptan, o grandes vías de circulación con formas retorcidas imposibles de seguir por cualquier vehículo a motor.
Acostumbrados a un perfeccionismo máximo no exento de algunos problemas ya en el pasado (como el "antennagate" del iPhone 4), esta situación extraña a los seguidores de la compañía y divierte a quienes la atacan. Es necesario hacerse cargo que un servicio de este tipo y con tantos datos no se monta de la noche al día, pero también es cierto que tan garrafales fallos deberían haber sido detectados y corregidos antes de su lanzamiento.
Tal vez sea por la comparación que Apple Maps no resiste con Google Maps, tal vez porque ha retomado su cauce natural, o tal vez por otros motivos, pero lo cierto es que la bajada de la cotización de las acciones del gigante tecnológico ha coincidido en el tiempo con esta polémica.
Por Guillem Alsina, el 27/09/2012.
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